viernes, 2 de julio de 2010

Sobre la infidelidad

Las personas somos infieles porque inevitablemente en alguna momento de nuestra vida necesitamos renovar nuestras emociones.

El problema viene justo el instante después de haber satisfecho ese deseo; es entonces cuando más necesitas el amor de la persona amada y el amante se convierte en un extraño; solo a veces el amante se convierte en la nueva persona a amar.

Como el orgasmo, ponemos todos nuestros sentidos en intentar alcanzarlo, pero solo durante el tiempo que lo estás teniendo disfrutas del máximo placer, de la emoción consumida; después el cuerpo como todo en la vida, vuelve a su realidad, a su rutina. ¿o no?